El sistema de inyección es una parte sumamente importante en el funcionamiento de su vehículo, ya que es el encargado de ‘inyectar’ la cantidad de combustible exacta y en el momento preciso al motor. De su óptimo funcionamiento depende que el vehículo funcione correctamente, por el contrario, si el inyector tiene sedimentos, corrosión, partes desgastadas o algún otro defecto, la inyección del vehículo se verá afectada, ocasionando inestabilidad, alto consumo de combustible, altas emisiones de CO2 o inclusive hasta fugas de combustible dentro del motor.
El Inyector posee una parte eléctrica, que determina la cantidad de combustible que debe inyectarse y en qué momento debe hacerse, y los inyectores ejecutan las indicaciones de la computadora del vehículo. Si los inyectores están en mal estado el motor dejará de funcionar bien, e incluso se detendrá.